Hablar de accesibilidad web es hablar de universalidad de la comunicación e información, pues es darle la oportunidad a todos de usar una de las herramientas más poderosas de este último siglo: Internet.
Y es que, tomando en cuenta el contexto actual, donde la humanidad ha sido puesta en jaque con la pandemia del coronavirus, es mucha la gente que ha recurrido a la web para entretenerse, realizar teletrabajo o informarse. No obstante, ¿toda la gente puede tener ese acceso?
"Si se piensa en cómo facilitarle la lectura de códigos a un robot, se está pensando inherentemente en las personas que poseen capacidades distintas".
Cuando Tim Berners-Lee bautizó la World Wide Web (WWW) junto con HiperText Transfer Protocol (HTTP) tenía en mente usar estas herramientas para escaparse de “las fronteras de las bases de datos” y de esta manera la información dejara de estar centralizada y se enriqueciera con la dispersión.
Bajo este contexto, el pensamiento de Berners-Lee sigue teniendo sentido hoy, sin embargo, no todos siguen la filosofía del fundador del World Wide Web Consortium (W3C)—un consorcio internacional que genera recomendaciones y estándares para la web—al desarrollar sitios web, quizás por ignorancia o por pereza.
Dejando pistas en el camino
Construir un sitio web va más allá de la estética que éste pueda tener a nivel de front y de cara al usuario en la distribución del contenido, colores, logos e imágenes, dado que se debe realizar un trabajo aún mayor que la gente normal desconoce, empero, ¿todos los desarrolladores realizan esta labor?
Ya hablaremos de esta labor, pero la respuesta a la interrogante planteada es, no; por lo mismo, hay muchas entidades o emprendimientos que a veces no entienden porqué su marca o empresa no figura en los motores de búsqueda de los diversos navegadores, no teniendo claridad en lo que les falta.
Cuando se habla de buscadores, debemos pensar en un robot que está haciendo lecturas a cada segundo, pero que necesita una guía para poder seguir el sendero correcto, por esta razón, es que se le deben dejar “pistas” para que pueda leer todo el contenido que se le quiere presentar al público.
Estas “pistas” son relevantes para los rastreadores virtuales y se consiguen haciendo sitios accesibles a través de la implementación de: etiquetados y headings bien jerarquizados (SEO on page), que contengan un lenguaje entendible; una navegación amigable con el tabulador del teclado, dando la posibilidad de explorar toda una página por medio de esta tecla; colores y textos que respeten un contraste, para que exista una visibilidad total de los mensajes; atributos de HTML, los cuales expliquen y describan la acción de un botón o el despliegue de un modal; y de otras características que le entreguen solidez.